domingo, 24 de octubre de 2010

Pesos pesados.

Otro post, algo más serio sobre el mismo tema: el cambio de Gobierno de ZP.

Creo que las palabras que lo definen son las que dan título a este post. ZP se ha rodeado de pesos pesados de la política española. Se ha rodeado de gente con mucha experiencia y con muchas tablas ante los medios, para explicar las acciones y políticas que debe tomar el Gobierno....sin tener intención de cambiar de trayectoria.

Políticos, que se refuerzan ante las adversidades y que son grandes gestores. Con una titánica tarea, que es por un lado explicar a los ciudadanos las cosas que se hacen y el porqué se hacen, y a su vez acortar las diferencias en intención de voto frente al PP, que actualmente se alarga hasta 14 puntos en favor de Rajoy. (Que en palabras de un dirigente popular: "manda huevos", ya que por meritos propios no es).

No hay que olvidar las trayectorias en gestión de crisis y de situaciones complejas, ni se pueden discutir las trayectorias a lo largo de la democracia y de la propia constitución europea, de los nuevos candidatos.

Por un lado apoya el peso en un político de renombre, gran gestor en diferentes ministerios, con grandes éxitos en apartados muy importantes y muy valorado por el votante general. Se le ha dado tanto poder, que es el ministro con más poder de la democracia española. Se habla en clave de sucesión a Zapatero. Aún creo que ese guión no se ha escrito, ni ZP ha deshojado esa margarita, pero está en la “pole position” para la sucesión, frente a Bono, como otro gran nombre en dicha carrera.

Se ha rodeado de un ex-sindicalista como ministro de trabajo. Aun no siendo político de prestigio, si es un gran gestor en ese ámbito, al que ha dedicado casi 30 años de su trayectoria laboral. No es casualidad, de que ha hecho cambios en el mercado laboral, obligado por los mercados, obteniendo el rechazo de los sindicatos y de parte de la población, por lo que ahora debe acercarse a los sindicatos y al consenso del diálogo social. Nada mejor que tener un interlocutor afín.

Se ha incorporado, sorpresivamente, a una joya de la izquierda, Rosa Aguilar, que tras 10 años como alcaldesa, segunda de abordo del brillante Julio Anguita, y como una de las grandes dirigentes de IU, se ha pasado como independiente al Gobierno de Andalucía, en primera instancia, y ahora al Gobierno de la Nación. Una persona muy valorada por la izquierda de este país (salvo el rencor propio de algunos militantes de IU, al sentirse agraviados por su marcha hace no mucho tiempo), una gran gestora municipal y como consejera Andaluza. Por lo que atraerá la simpatía de la izquierda frente al extremismo en aumento de la derecha.

la incorporación más criticada ha sido la de, la hasta ahora, portavoz del Psoe: Leire Pajín. Muchos la tachan de no tener experiencia, de ser muy joven y haber hecho como únicos méritos ser una de las manos derechas de ZP.
Aún estando en desacuerdo con su incorporación al Gobierno, creo que es una persona con una labia espectacular, unas tablas ante los medios envidiable y con una trayectoria en gestión bastante fuerte y demostrada en algunos trabajos políticos en los que ha tenido las riendas. Aun no siendo santo de mi devoción, creo que ZP busca acercar y explicar las decisiones de sus políticas y Pajín tiene capacidad sobrada para llegar a la población, y por su juventud tal vez a los más jóvenes (aunque creo que es donde más rechazo obtiene).

Luego algunos cambios de cartera, que a algunos de la derecha les sorprende que se pueda cambiar de cartera como de camisa. La explicación es clara, un ministro tiene carácter político, no debe ser necesariamente un gran conocedor y especialista en esa área. Y eso es lo que ha buscado el Presidente: gestores y políticos de peso. Como Trinidad Jiménez, que a pesar de salir perdedora de las primarias de la comunidad de Madrid, frente a Tomás Gómez, ha sido elegida para seguir siendo ministra y encima en un área bastante fuerte, como las relaciones exteriores. Ya tuvo buena experiencia y buenos resultados en su labor con Iberoamérica.

Como último, comentar como acto de justicia política, la incorporación de Jauregui, gran político tanto en la política territorial vasca durante años, luego en diferentes gobiernos siempre de segundón y que luego pasó a Europa. Un político bragado en mil batallas y siempre con buena valoración.

Reitero que es un equipo sólido, con solvencia, pero con una titánica tarea: sacarnos de la crisis.... y a solo año y medio de las elecciones. El asunto es si les dará tiempo a que la gente perciba que mejora la cosa...y recuperen intención de voto.

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